Hola soy Leyfa Galindo, me decidí a formar parte del grupo porque el año pasado falleció mi perrita niebla y tuve que guardar ese dolor tan grande para apoyar a mi hija, ese mismo año sufrí la pérdida de un órgano y fue justo el Diplomado y el apoyo incondicional de Lupita que me ayudaron a sanar ambas perdidas tan dolorosas para mí solo me resta decir gracias Lupita.

Está terapia me cambió la vida simple y sencillo; y cuando digo me cambió la vida me refiero a que trabajar la terapia de duelo, ha cambiado mis creencias limitantes arraigadas en cuanto a cómo veo el dolor pero sobretodo como veo la vida. Ha sido un proceso de sanacion profundo, hermoso, intenso. Pero con el cual hoy veo la vida de manera diferente. Gracias Lupita por siempre.

Desde mi primera sesión con Lupita en 2019, me he sentído sostenida, en un espacio seguro y lleno de amor, donde nunca soy juzgada, sino aceptada tal como soy. Hoy, al mirar hacia atrás, puedo ver todo lo que he crecido en estos años: las pérdidas que he superado, cómo manejo de forma más sana mis relaciones, y cómo integro mis emociones con mayor conciencia.

Gracias a este proceso, ahora cuento con herramientas que me permiten atravesar momentos difíciles con más fuerza y sabiduría. Hoy vivo la vida que quiero vivir: me elijo a mí misma, proceso mis traumas, amo a mis seres queridos de una forma más sana, logro mis objetivos y enfrento la vida con seguridad, sin los miedos que antes me limitaba, especialmente como migrante.

Todo esto ha sido posible gracias al acompañamiento de Lupita, a sus conocimientos y, sobre todo, a su capacidad de transmitir conceptos complejos de manera práctica, con amor, carisma y empatía. He recomendado a muchas amigas que hoy en día también trabajan con ella, inspiradas al ver los cambios en mí.

No tengo palabras suficientes para expresar lo agradecida que estoy con Lupita por abrirme este espacio de sanación y crecimiento.

Tomar terapia con Lupita fue un parteaguas en mi vida, acudí con ella después de que mi papá murió lleno de preguntas, de sentimientos a los que no lograba darle forma y pensamientos que no entendía. Honestamente al llegar con ella, ya había perdido la fe en mi propia existencia pero trabajar con ella me dio la oportunidad de reencontrarme y resignificar mi existencia. No hay palabras suficientes para agradecer todo lo que logré gracias a su acompañamiento, la vida me presentó con más pérdidas y muertes, mismas que traté con ella. Acudir a terapia con ella es sinónimo de calidez humana y la oportunidad de descubrir la introspección más profunda de tu ser. De Lupita aprendí que de cada pérdida siempre hay algo que ganar.

¡Muchas gracias Lupita!

Hola soy Verónica, estoy en el taller de Duelo y Perdón, a un año de haber iniciado mi primer taller, he confirmado muchas cosas hoy, no es magia, es un trabajo constante, el dolor ha disminuido, si siguen ahí unos sentimientos, pero he cambiado y modificado la perspectiva, la forma de ver la cosas, la forma de percibir y estoy consciente de que debo disfrutar el hoy, porque mañana no sabemos, gracias Lupita por este taller.

Mi nombre es Delia Elga y estoy en el Diplomado de Consciencia Tanatologia y la magia de la meditación, he obtenido las herramientas para aceptar las pérdidas, para crecer, para llegar a una estabilidad emocional. La verdad es que me sentía muy perdida incluso deshecha y esto poco a poco me ha ayudado a crecer, a aceptar las cosas a entender muchísimas otras y no nada más relacionado a las pérdidas de muertes, si no, en todos los aspectos de mi vida.